La Novia Equivocada Novela de Day Torres

ATRACCIÓN PELIGROSA. CAPÍTULO 55. Primeros pasos

-Te vas a tener que casar conmigo otra vez… -Aquellas palabras salieron como un murmullo de los

labios de Aaron y Nahia lo miró con ojos muy abiertos mientras él intentaba sonreir-. No puedes ir

cortándome trozos sin asumir las consecuencias, señorita.

Nahia apretó los labios y trató de no sonreir.

-No te cortaron otro trozo, te cortaron el otro brazo -intentó asustarlo ella.

-¡Ah! Pues con más razón, ¿quién me le va a hacer ahora un cariñito a la ?

-¡Aaron! -exclamó Nahia y él abrió los ojos, pero no se miró ninguno de los dos brazos, solo la miró a

ella.

-¿Estás bien?

-Mejor que tú, eso es seguro -murmuró Nahia con angustia. Nos diste un susto horrible.

-Tú me diste un susto horrible -replicó él mientras su rostro se llenaba de preocupación. ¿Cómo te

sientes? ¿Te duele algo? Creo que te agarré muy fuerte cuando te saqué del auto…

Nahia negó mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.

-¡Robocop, tú eres el que acaba de salir de un quirófano! ¿Cómo se te ocurrió hacer eso? ¡Casi

pierdes el brazo! -dijo ella con voz rota.

-¡Oye…! Cualquier parte de mi cuerpo es sacrificable si tú estás bien -respondió el mirándola a los

ojos – Te amo, muñeca. Todo va estar bien.

Ella asintió limpiándose las lágrimas y tomó su mano buena para besarla mientras él hacia una mueca

de dolor.

-¿Te duele? -preguntó Nahia asustada.

-Si… me duele mucho… aquí -respondió él poniendo la boca como piquito de pajarito y Nahia sonrió

entre las lágrimas antes de inclinarse y besarlo-. Te amo, nena, te amo… otro besito… ay me duele…

otro besito.

-Aprovechado lo regañó Nahia y Aaron suspiró

-Dime que no me amas -murmuró él conteniendo el aliento. Dime que ya perdi tu corazón para

siempre y te juro que no te hago chantaje. Pero si todavia me amas un poquito te voy a corretear como

cachorrito abandonado hasta que me digas que sí.

Nahia apretó los labios porque pocas tonterías le habia estrujado el corazón como las que estaba

diciendo en ese momento. ¿Cómo se lo iba a negar? Podia odiarlo con todo su corazón, podia querer

matarlo a sartenazos, pero dejar de amarlo era muy distinto.

-¡Te vas a tener que ganar esa boda, Robocop! -le advirtió. No ha mujer en el mundo que te haga

trabajar como yo te haré trabajar… pero te amo… sabes que te amo.

Lo vio esbozar la sonrisa más luminosa del mundo mientras tiraba de su blusa para que se acercara, y

Nahia lo besó con suavidad.

-Esta vez varnos a hacer una boda escandalosa… por todo lo alto… con una jaula…

-Y un sartén…

-Y nuestros hijos… -murmuró Aaron con un suspiro-. Ya tenemos dos… no vamos a poder dormir

nunca más…

13

Nahia se rio por lo bajo para no despertar a Kyle, pero cuando los dos se giraron para verlo el niño

tenía un ojo abierto y sonreía.

La familia pudo entrar a verlos poco después y el alivio se generalizó cuando vieron a hijo y papá

despiertos y hablando. Los King se llevaron a Nahia a descansar y Kyle y su papá iniciaron su

concierto de quejas para ser consentidos.

Una semana después les daban de alta en el hospital y Nahia detenía la camioneta no en la casa de

Aaron sino en la suya.

-¿Estás segura? -preguntó él.

-Bueno… puedo ir cada diez minutos a regañarte o solo puedo asomar la cabeza en la habitación y

enseñarte el sartén. Es una cuestión de ahorrar tiempo.

Aaron asintió con una sonrisa, porque aunque estaba implícita la advertencia de que aquello solo sería

temporal, en lo que se recuperaban, él sabia que su sueño de recuperar a Nahia estaba más cerca de

lo que jamás habia imaginado.

Las semanas que siguieron fueron duras, y terminaron convirtiéndose en meses dificiles. Que Kyle

pudiera apoyar el peso de su cuerpo sobre un par de prótesis era doloroso y que aprendiera a

gobernarlas aún más, así que Nahia se tomó un tiempo de la empresa y su hermano James estuvo

más que feliz de ayudarla ocupando su lugar.

Los Orlenko construyeron todo un gimnasio de rehabilitación en la casa de Nahia y Kyle aprendió a

caminar solo pocos meses antes de que Julie lo hiciera. Era lindo verla tratar de imitar a su hermano

mayor, así que aquellas dos medias familias tuvieron que unirse más que nunca para poder construir

un nuevo comienzo para aquellos niños.

Seis meses después….

-¿Podemos parar por hoy? Estoy cansado, me duele -murmuró Kyle uno de esos dias en que la

rehabilitación se le hacia particularmente dificil.

-Ya sé, hijo, pero si no ejercitas esos músculos, nunca va a dejar de doler-murmuro Aaron con

suavidad

-¡Pero es que parezco el hombre que fue a la luna!-se quejó el niño-. ¡No sé cómo hacerlo sin levantar

los pies asi!

Nahia llegó junto a ellos y le sonrió.

-Yo sé lo que tú necesitas le dijo. Estás tratando de caminar cuando lo que necesitas es aprender a

bailar.

-Mamá, los hombres no bailan -rezongó Kyle.

–

-Que tu padre sea un patón sin ritmo no significa que tú lo seas también se carcajeó ella-. Además,

bailando es como se conquista a las chicas…

-¡Pues entonces me apunto! -sonrió él.

Nahia le entregó a Julie a Aaron y la niña le pegó dos veces en la cabeza antes de darle algo parecido

a un besito con baba en la mejilla.

-¡Ay qué cosa más linda! Pero tú no te vas a deslumbrar con un chico que baile ¿verdad mi cielo? ¡No

tú no! ¡Tú no! Porque tu papá les va a disparar a todos… ¿Verdad que si? ¡Si papá tú les disparas!

Kyle y Nahia se miraron y el niño se encogió de hombros.

-¡Si tú te vas a casar con él, entonces yo tengo esperanzas incluso sin bailar! -se burló.

Había una estrategia especial en aprender a bailar, y era que no podía levantar los pies, así que en la

siguiente semana Nahia estuvo enseñándole a Kyle a bailar vals, y diez días después lo vieron dar sus

primeros pasos como si no fuera el hombre de la luna.”

-jPapáaaaaaaaaaa!

Aaron casi derrapó frente a él y se le humedecieron los ojos al verlo andar con total seguridad. Lo

abrazó en cuanto terminó de cruzar la sala y le revolvió el cabello.

-¡Eres un campeón, hijo! Sabía que podías hacerlo.

-Todavía duele, pero el año que viene estaré jugando fútbol, te lo prometo -sonrió.

-Pues hay que pedirle a tu tio que le ponga pistones neumáticos a esas piernas… ¡O te puedo enseñar

a pelear! ¿¡Te imaginas las patadas que darias!?

-¿Quieres que mamá te mate a sartenazos? -se rio Kyle.

-Buen punto. ¡Ahora vamos a darle la sorpresa!

Los gritos de Nahia debieron escucharse hasta Ucrania de la emoción. Y no mucho después las

familias se reunian para celebrar aquel logro tan importante de Kyle.

-Bueno, ¿y tú qué? Ya llevan seis meses viviendo juntos, ¿la boda para cuándo? -preguntó Jake

mientras preparaban el asado del dia.

-¡Pues eso mismo digo yo! ¡Que andas con mi hija viviendo en pecado y ya es hora de que se vista de

blanco! -replicó Nathan y Meli le dio un codazo.

-No sabia que te molestara el pecado-se rio. 2

-Pues con algo me tengo que poner dramático. ¡Tú déjame que si no estos no se casan ni en tres

años! Aaron respiró profundamente y sonrió.

-Yo ya me quiero casar, créanme, ¡pero es que tengo que hacer algo muy especial para pedirselo!

-¡Yo sé! ¡Yo sé! -dijo Kyle y después de exponer su idea todos se miraron.

-Bueno… o lo deja o se casa con él, ¡pero estoy seguro de que será divertido! ¡Además fue idea de

Kyle, seguro sale bien! -dijo Nathan encogiéndose de hombros. ¿Se puede apostar? 2

A su lado es escuchó una risa.

Claro que se puede apostar! -aseguró Katerina y enseguida se giró hacia sus hijos-. Muchachos,

empiecen a hacer llamadas. ¡Tenemos una jaula que organizar!